¡Tenemos a muchas personas increíbles enseñando en nuestros programas, y mientras nuestros estudiantes se sientan cada semana a trabajar con ellos, sabemos que es posible que el resto de la comunidad no los conozcan!
Este mes, queremos resaltar a Lynn Hutchinson quien dirige el programa de Música de Elemental @ Westminster. Lynn ha tenido muchos roles en nuestra organización. ¡Como madre de una estudiante de Elemental Music, como miembro de la junta directiva y ahora como maestra en nuestros programas, Lynn entiende a Elemental Music desde todos los ángulos! ¡Estamos muy emocionados de que conozcan más sobre Lynn - pianista, compositora, arreglista y extraordinaria maestra de música!
EM: ¿Cuánto tiempo llevas enseñando en Elemental Music? ¿Puedes contarnos un poco sobre tu historia con la organización?
Lynn Hutchinson: Llevo tres años enseñando con Elemental Music en su increíble programa de clases de música durante las horas de escuela en la escuela primaria Westminster.
Mi hija es violinista y empezó a tocar en el programa Elemental Strings cuando estaba en primaria. Me entusiasmó tanto el enfoque de Elemental hacia la educación musical que busqué involucrarme más en la organización. Me uní a un comité que creó un plan estratégico actualizado para Elemental. Parte del cual incluía la posibilidad de implementar un programa como el de Westminster. Es muy emocionante formar parte de una visión hecha realidad y ser testigo del impacto de Elemental Music en esta nueva función.
EM: ¿Cómo empezaste en la música?
LH: De niña, muchos de mis familiares eran músicos autodidactas y amantes de la música. Pasábamos las vacaciones cantando y tocando instrumentos juntos, sin importar la edad ni el nivel. Mi madre me enseñó a leer música y a conectar las notas que estaban en la página con las teclas del piano. Seguí aprendiendo por mi cuenta hasta que fui a la universidad.
EM: ¿Cuál es uno de tus recuerdos musicales favoritos?
LH: ¿Un recuerdo musical favorito? ¡¿Por dónde empezar?! No puedo contar cuántos recuerdos musicales favoritos tengo. Podría ser la emoción de tocar en un grupo de cámara o una banda. El placer de tocar el ukelele y cantar con un grupo de niños de primer grado. Escribir un arreglo orquestal que los músicos tocan con gusto. O regalarle música a alguien que necesita consuelo. No creo poder nombrar un favorito.
Pero compartiré uno de los muchos que se destacan: además de ser pianista y profesora, soy arreglista. Tuve la gran suerte de tener una profesora de coro en la preparatoria que fomentó mis intereses, dándome múltiples oportunidades de escribir y dirigir nuestro coro de 50 voces. En mi último año de escuela, nuestro coro fue invitado a presentarse en la convención anual estatal de educadores musicales. Mi maestra me entregó la batuta para la última canción de nuestro repertorio: mi arreglo a capela del Himno Nacional. Aunque yo era la que iba al frente, sabía que mis compañeros estaban emocionados de demostrar que uno de nosotros podía crear y dirigir. Todos cantaron maravillosamente; orgullosos de nuestro sonido; por lo mucho que nos gustaba cantar juntos; por estrenar una nueva versión escrita por otra niña como ellos. Tal como lo escribí, en lugar de un final grandilocuente, la canción se desvanece pacíficamente.
Mientras el último acorde flotaba en el aire, con las manos aún levantadas, la sala de cientos de educadores se quedó en silencio. Bajé las manos lentamente. Todo estaba en silencio. Cuando me di la vuelta, el público estaba de pie. En silencio. Fue muy conmovedor. Escuché sollozos entre el coro que estaba detrás de mí. Algo especial había sucedido para mí y mis amigos ese día. Pudimos crear un momento mágico. Juntos. Y nunca lo olvidaré.
EM: ¿Qué te inspiró a enseñar además de tocar música?
LH: A lo largo de mi vida, he tenido la gran suerte de contar con tantas personas, maestros y artistas que se han volcado en mí y mi arte. La enseñanza es una expresión natural de mi gratitud. Me encanta ver a los estudiantes descubrir algo nuevo sobre sí mismos y la humanidad a través de la música.
EM: Si pudieras darle a nuestros estudiantes un consejo, musical o de otro tipo, ¿cuál sería?
LH: En cuanto a consejos, supongo que podría hablar sobre la práctica y la dedicación. Pero si me permiten, en cambio, tengo una petición a la nueva generación de músicos, audaces, inteligentes e increíblemente capaces, que por favor, estén abiertos a aprender de cualquier tipo de música y músico con el que se topen. Cada vida musical, cada género, tiene su propio camino y cultura. Tenemos mucho que aprender los unos de los otros. La música vive en cada corazón, sin importar cómo se haya educado o cómo toque. Creo que, como músicos, cambiamos el mundo amando y respetando todas las variedades del buffet. No sólo algunos platos.
EM: ¿Hay algo más que te gustaría agregar y que crees que podría ser interesante para nuestra comunidad?
LH: A través de Elemental Music, tengo el gran placer de enseñar a más de cuatrocientos estudiantes cada semana. Cada clase comienza cantando juntos algo sencillo y alegre, reafirmando en los niños la importancia de su voz y sus decisiones. Conectar personalmente con los niños es mi prioridad favorita en el aula de música.